martes, 16 de diciembre de 2008

LO QUE ME GUSTA


Me gusta despertar en la mañana y quedarme un poco más en la cama. Sintiendo las sábanas tibias o despertar a Luis a besos. Me gusta desayunar hot cakes y enchiladas de Sanborns.
Me gustan los días de lluvia. Andar en bicicleta por Xalapa, caminar en los parques, meditar en la cima del cerro. Sentir que el corazón se me acelera, sudar mucho. Descubrir cómo vibra el cuerpo después de correr unas vueltas o de hacer una hora de ejercicio. Me gusta dormir después de eso.
Me gusta fumar cigarros que saben a vainilla. Leer novelas policíacas, cuentos y lo que escriben mis amigos. También he descubierto recientemente el googling y me he llevado sorpresas estremecedoras.
Me gusta abrazar a Elena y olerla, hasta que se harta y con sus manitas me empuja. Huele a avellanas y a leche. Me gusta mirarme en sus ojos y verla sonreír cuando se despierta, toda despeinada, en medio de un lío de cobijitas. Me gusta vestirla de rosa y descubrir que los zapatos ya no le quedan porque está cada día más grande. Me gusta no darme cuenta cuando atraviesa toda la casa para estar junto a mí, en la cocina. Como todavía no sabe caminar, se va agarrando de la pared y el recorrido es largo. ¡Es feliz con cualquier cosa!
Me gusta pintar con Luis y verlo concentrado en poner todos los colores en el mismo pincel. Me gusta escucharlo reír, oír las historias que inventa para que sus carros actúen o sus muñecos de peluche. Me gusta contarle cuentos haciéndole las onomatopeyas, me gusta ver que se parece a lo mejor de mí. Me gusta verlo dormido, tan tranquilo. Me gusta saber que puedo darle su leche, una casa, ¡dulces! Y hasta algún juguete cuando nos olvidamos de la política de austeridad familiar. Me gusta cuando tiene hambre y pide de comer.
Me gusta abrazar a Luis y besarle el cuello. Me gusta su cabello cuando le crece un poco más de lo debido. Me gusta cómo se ve en su uniforme de Cloro. Me gusta cuando sonríe y cuando me hace reír con sus chistes de a dos por un peso. Me gusta cuando quiere café o cuando me pide que compre una botella de vino para celebrar en casa. Que es más seguido de lo que podría pensarse. Me gusta verlo dormido después de hacer el amor, y durante, me gusta su piel cálida, el peso dulce de su cuerpo sobre mí, la fuerza de sus piernas y brazos, toda trabajando para hacerme feliz.
Me gusta mi casa. Es pequeña pero todos los que vivimos en ella cabemos bien. Además es un regalo de mi madre. Me gusta también recordarla a ella, fantasear con los episodios de su infancia y convertirla en hada.
Me gustan las bromas de mi papá y la forma en que sonríe, medio de lado. Me gusta que toque la guitarra y sea el alma de la fiesta. Me gusta que coma mucho y rico, que no le guste la comida caliente sino media fría y que siempre tenga muchos amigos. Me gusta cuando alguien llega y me dice ¡Conocí a tu papá! Porque siempre está acompañado de un buen comentario.
Me gusta que mi abuelita vaya a la casa y me encanta escucharla cuando los niños la hacen reír. Me gusta que los quiera tanto, que parece que los quiere más que a mí. Me gusta su comida y su charla. Me gusta que se vista de blanco y saber que siempre puedo llegar a su casa, y encontrar cosas mías y sentirme bien. Me encanta la hamaca bajo su acacia y su pródiga estufa. Me gusta que mi abuelito me cuente historias, siempre las disfruto mucho. Creo que nunca se lo he dicho.
Me gusta escribir y leer porque siento que es una forma de conocerme a mí y al mundo. Creo que es mi forma más fácil de comunicarme, ya que hablando a veces digo de más o de menos.
Me gusta trabajar. Sólo lo descubrí cuando dejé de hacerlo y lo retomé en cuanto un buen amigo me tendió la mano para volver. También me gusta tener pocos amigos pero bien seguros. Me gusta que sean como dice la canción de Serrat que son.
Me gusta escuchar a Serrat y a Sabina, y descubrir nuevos gustos musicales a la vuelta de la esquina.
Me gusta estar donde estoy y hacer lo que hago. Me gusta que eso me guste y que me contente al menos estos años, no con la maestría en México, ni con los viajes a Europa, ni con las travesías con brujos, sino con llevar a Luis al parque y subirnos al camión chatarra y a la resbaladilla y al sube y baja. Me gusta sentir la brisa repentina bajo el sol que pica y anuncia que viene la lluvia. Me gusta estar contenta criando una niña preciosa, que grita cuando algo no le parece y se jala el vestido para decirte que necesita cambio de pañal, que adora la música desde ahorita y se duerme con canciones de los hermanos Rincón.
Siempre que retomo este texto me pongo a llorar, así que es mejor que le ponga punto final de una vez. Me gustan las cosas que llegan al corazón y recordar chistes en el trayecto de la casa al diario, me gusta fijarme en las hojas de los árboles porque todas son una obra de arte, me gusta el mar de Cancún y la punta sur, con sus joyas turquesa y sus mil azules, me gusta el brillo de la arena y cómo suena el viento cuando uno lo llama desde lo más alto del faro. Me gusta Coatza siempre, pero más cuando sopla el norte.

1 comentario:

Unknown dijo...

Hola:

Me gusta que seas mi amiga...

Sabes ese día de tu cumpleaños quería felicitarte por teléfono, pero no te pude encontrar y marqúe al número que me dio una chica que estaba en tu casa, pero me dijeron que estaba equivocado. Espero que te la hayas pasado muy bien.

Me gusta que al leerte te encuentres feliz, que tu vida esté rodeada por el amor de tu familia, que estes muy bien.

En este nuevo año que se aproxima, espero que te vaya super super bien, que todos tus propósitos se realicen de la mejor manera posible, que tu vida esté llena de satisfacciones, completa de todo lo bueno...

Les mando un abrazote a tí y a toda tu familia...

Hasta pronto.